El Petrolul FC insolvente.

Desde que en diciembre del 2014 los máximos accionistas y el gerente general del club fueron acusados y arrestados bajo los cargos de formación de grupo delictivo organizado, evasión fiscal y lavado de dinero (crearon circuitos financieros ficticios entre empresas fantasma con el fin de eludir el IVA y el impuesto sobre la renta, lo que generó una pérdida de aproximadamente 15 millones de euros durante el período 2013-2014) la situación económica del Petrolul Ploesti FC no ha parado de empeorar, hasta el punto de solicitar la apertura de un procedimiento de insolvencia (se estima la deuda del club en unos 5 millones de euros) con el propósito de reorganizar el club bajo control judicial e iniciar un concurso de acreedores.


Aquí habría que añadir que el Petrolul es el octavo club de la Premier League que solicita la insolvencia en los últimos dos años, después de FC Rapid, Gloria Bistrita, Universitatea Cluj, Otelul Galati, FC Vaslui, FC Dinamo y CFR Cluj. De éstos, seis juegan en la primera división actualmente, el Gloria Bistrita en Liga 2 y el FC Vaslui desapareció, fue refundado y milita en la cuarta división rumana. 

La legislación de la UEFA no permite participar en competiciones europeas a los equipos que se encuentran en situación de insolvencia hasta un año después de la finalización de este procedimiento. El Petrolul ocupa posición en la clasificación que otorga puesto en la Europa League, pero tendría que renunciar siguiendo esta normativa.

Si a todos estos problemas unimos que se encontraba abierta la ventana del mercado de invierno, la desbandada de jugadores importantes no se hizo esperar: el ex del Getafe Juan Albín a los Tiburones Rojos de Veracruz, Njongo Priso a Hungría, Mustivar a la MLS o Gerson al SV Kapfenberg austriaco.

Sin embargo, Pablo de Lucas, que ya conoce perfectamente lo que es un concurso de acreedores tras los vividos en el Real Sporting y en la UD Salamanca, no logró salir del equipo y no fue por falta de ofertas.

Dorsal 91 - Pablo de Lucas (1)

De Lucas, valorado en 1,8 millones de euros por el prestigioso portal transfermarkt, parecía dirigirse al HNK Rijeka de Croacia; incluso se ausentó de algunos de los encuentros del equipo en la concentración de invierno en Turquía, pero cuando el traspaso estaba a punto de concretarse, las pretensiones económicas del Petrolul FC se elevaron de tal manera que los croatas no cerraron el trato.


El rendimiento del centrocampista en las dos temporadas que lleva en el equipo está siendo muy alto, hasta el punto que Adrian Mutu, compañero durante la pasada temporada, llegó a pedir su nacionalización para que pudiera jugar con la selección de Rumanía. El alicantino no descartó esta posibilidad. (Sería curioso que el campus de verano de la Escuela de fútbol de Mareo diera su primer internacional para el combinado nacional rumano).

Una de las soluciones de los problemas económicos del club será, como en tantos otros casos, los traspasos de futbolistas, y Pablo de Lucas, en semifinales de Copa y segundo en la Liga, intentará terminar la que será su última campaña en las filas de Petrolul FC levantando algún trofeo.


·Foto: (1) http://www.gsp.ro/